29.10.07

De los números en cuenta regresiva.

Solo los vivos no le temen a la muerte. Al resto no nos queda más que cuidarnos de las historias de espantos y las dagas malintencionadas.
Sabes..? Pensaba hoy algo importante, como todo lo que debería pensar y nunca hago:
Si muero mañana, tú lo sabes de primera fuente, me quedo con facturas pendientes. Viajes, historias, palabras, personas, amores, banderas... destino, desidia y miedo mediante, mi balance general se escribe en números rojos y letra de molde. El síndrome de abandono, como tú lo llamas, es un juego al que me gusta recurrir cada vez que el mundo cambia de color.
-Y mi escala cromática anda vuelta loca.-
A ti y a mí esa escala siempre nos vino guanga. Jugamos a recortarla por cachitos y decorar con ella nuestro edencito privado. Sin embargo, ahora que nos llovió en el jardín, y que no hubo más remedio que correr cada quien a su refugio, toca evaluar lo que se mojó en el tendedero.
Paracaídas parecidos a promesas, juramentos de plástico hechos en la última mesa de un antro, o una caja verde repleta de lápices de labios se asoman entre los recuerdos que no tuvimos, aunque eso mismo los disfrace de inolvidables. Las envolturas de los cuentos que no contaste o los buitres silbando las canciones que no canté, son tatuajes de quemaduras en los brazos que no fuimos, en la espalda que cada vez me es más ajena.
Y sin embargo, no hay segundo que no se ilumine de tu voz de tormenta y lluvia calma.
Recién me hacías una pregunta que no entendí, y aún así respondí como el soberbio que me jacto de ser.
Mi respuesta no cambia, pero su intención se dulcifica: hemos sido lo que debimos ser.
Mi gracias es pequeño. No llena la luna entera, pero busqué que la media luna que sí abarca tuviera rigurosa forma de sonrisa, y lo he logrado.
Sé feliz.

-LuMmo.

PD. Y responde el teléfono alguna vez.

1 comentario:

Skene dijo...

pinche lufemol, me encanta esa capacidad que tienes para manosear las palabras a manera de que se acomoden entre ellas y quede un texto de esos que te dejan un ay! entre adrelinoso y entusiasmado por lo shido que fue leerlo...

ya no abandones el lugar, mira que habemos quienes disfrutamos mas que mucho leerte.

abrazos de pay de limón.
xoxo